En lo referente a la industria de la impresión 3d, existen muchos caminos por los que la tecnología debe seguir avanzando para continuar evolucionando. Hasta ahora, y centrándonos más concretamente en la impresión aditiva con filamento (también conocida como FDM), la evolución ha venido en forma de la calidad de capa que se puede alcanzar, la inclusión de un segundo extrusor para poder imprimir soportes con materiales solubles o la creación de infinidad de materiales diferentes. Por supuesto, éstos caminos aún deben seguir explorándose, pero XYZ Printing ha decidido seguir otro camino, uno de los que más se estaban reclamando: la impresión 3D a todo color.
El pasado 14 de septiembre, XYZ Printing realizó en Madrid un evento para presentar tres de sus nuevas impresoras, a cada cual más interesante, que llegarán al mercado a lo largo del mes de noviembre. Por supuesto, el plato fuerte del evento y de los próximos lanzamientos de la marca es su da Vinci Color, pero también encontramos máquinas tan suculentas como la da Vinci Nano, una impresora de tamaño y precio reducidos, o la da Vinci Super, que nos permite crear piezas de 30x30x30 cm y con cualquier tipo de material.
Pero lo que realmente ha creado un gran revuelo y ha hecho que todas las miradas se dirijan a la marca con sede en Taiwan ha sido su da Vinci Color. ¿Imaginas poder imprimir cualquier elemento 3D con una gama de 16 millones de colores? Pues eso es, exactamente, lo que nos ofrece esta impresora tan interesante. Su funcionamiento es sencillo: el extrusor va depositando el filamento (un PLA especial de color “natural” o traslúcido cuya composición permite absorber mejor la tinta) y un conjunto de cartuchos de tinta CMYK que se aplican, como ocurre en cualquier impresora 2D de inyección, sobre las capas externas de la pieza impresa.
Ejemplo de mosaico impreso con la nueva XYZ
La inclusión de la tinta sobre el PLA fundido repercute, obviamente, en el tiempo de impresión, que puede llegar a alargarse hasta un 20% de lo que tardaría una impresión monocromática del mismo modelo 3D, sin embargo este tiempo extra, viendo los resultados, es totalmente asumible.
Esta da Vinci Color abre muchas puertas para un tipo de impresión que, hasta ahora, dependía exclusivamente de la tecnología ColorJet (generando piezas de tipo arenisca bastante frágiles) o del uso de hot-end especiales que mezclan filamentos de tres bobinas independientes (con el consiguiente uso de espacio y coste adicional). Sea como sea, estas tecnologías que mencionamos tenían ciertos problemas de precisión a la hora de aplicar el color, problemas que han quedado bastante solventados con la nueva impresora de XYZ Printing. Y tú, ¿qué imprimirías con esta máquina?